Nayib Bukele fue reelecto como presidente de El Salvador este domingo con más del 85% de los votos y ahora se prepara para gobernar casi sin oposición, con 58 de los 60 diputados del Congreso.

«El Salvador ha roto todos los récords de todas las democracias del mundo«, comentó desde el balcón del Palacio Nacional, para su pueblo que lo ovacionaba y celebraba su victoria histórica. «No sólo hemos ganado la presidencia con más del 85% de los votos, sino que hemos ganado la Asamblea Legislativa con 58 de 60 diputados, como mínimo«, afirmó, seguido de fuegos artificiales.

«La oposición quedó pulverizada«.

Bukele beneró su «guerra» contra las pandillas que impuso en marzo de 2022 y que suma casi 76.000 detenidos, con el que convirtió a El Salvador en el país más seguro del hemisferio occidental en 2023, partiendo de ser el más peligroso del mundo.

«Dicen que los salvadoreños no quieren el régimen de excepción, que viven con miedo (…) El pueblo salvadoreño habló fuerte y claro y de la manera más contundente«, afirmó. 

La característica del nuevo mandato

Bukele controla el Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, y también la prensa oficialista que comienza a abarcarlo todo en su país.

Su mandato anterior tuvo denuncias de Amnistía Internacional y Human Rights Watch, que demandan por arrestos arbitrarios, torturas y muertes en prisión. Unas 7.000 personas inocentes fueron liberadas, pero muchos siguen encarcelados. Por lo que Bukele dijo en su discurso desde el balcón, «tal vez pusimos prioridad en los derechos de la gente honrada sobre los derechos de los delincuentes».

 La oposición

El líder izquierdista del FMLN, que ha quedado segundo en las votaciones con el 4%estimado, declaró que la campaña del oficialismo fue injusta y monopolizada mediáticamente.

“¿Cuántos spots televisivos nos dio? Cero. ¿Cuántos espacios radiales? Cero. Nos ahogaron económicamente. Todo el mundo cayó. No nos dieron la deuda política que es ley de la república. Allí andan los ministros con carros del Estado. ¿Por qué no usan los de ellos en época electoral?”, denunció el opositor.

El pueblo salvadoreño

«Sería la primera vez que existe un sistema de partido único en una democracia«, aseguró Bukele, que llegó a la presidencia en 2019 con el 53% de los votos con promesas de «cambio» en un país harto del bipartidismo Arena-FMLN, que no había podido resolver los problemas de inseguridad y pobreza.

Hoy en día el 29% de los 6,5 millones de salvadoreños que viven en el país son pobres, según la Cepal, con oleadas que siguen emigrando a Estados Unidos en busca de oportunidades de trabajo. Unos 3 millones de salvadoreños que viven en otros países envían dinero a sus familias por US$8.000 millones anualmente, mientras su presidente, hoy reelecto, promociona megaproyectos turísticos como «el país más seguro de América Latina».