El lunes 8 de enero, desde Cabo Cañaveral, EE.UU., el mundo vivió emocionado el lanzamiento del nuevo cohete de ULA (United Lunch Alliance), la empresa que nació en el 2007 y sería la principal competencia en la carrera espacial de Space X, la compañía de Elon Musk.

ULA es la fusión de 3 gigantes compañías aeroespaciales. Este lunes el VULCAN despegó exitosamente a las 02:18hs (horario de la costa este de EE.UU.) desde la estación espacial de Cabo Cañaveral, Florida y se esperaba que alunizara el 23 de febrero, sin contar con personas a bordo.

El objetivo del lanzamiento fue poner en marcha la misión Peregrin 1, con destino a la superficie a la luna. Como parte de la iniciativa de carga lunar comercial de la NASA, que consiste en abrir el camino para que las empresas privadas puedan realizar servicios de transporte de todo tipo hacia la luna de, prácticamente, cualquier cosa.

El módulo llevaba cargas de EE.UU., Alemania, México, Reino Unido, Hungría, Japón y Argentina.

Alemania envió un detector de radiación y carga útil comercial, EE.UU. envió 6 equipos científicos de la NASA y un vehículo explorador lunar diseñado por estudiantes universitarios. El resto de naciones, como Argentina, mandaron cápsulas del tiempo, obras de arte, literatura y bancos de imágenes.

Por otra parte, México envió algo muy interesante, llamado Proyecto Colmena, que consiste en 5 nano-robots que pesan menos de 60 gramos y de 12 centímetros de diámetros, encargados de la exploración de la superficie lunar, complementando la visión del explorador estadounidense. Con este equipamiento, la misión podría contar con mucha más información en menos tiempo.

¿Cuál fue la causa de la falla?

Ya estando en el espacio el módulo Peregrin experimentó un problema de propulsión después de que entrara en modo operativo, impidiendo que la nave maniobrara para orientar los paneles solares correctamente hacia el sol. Además, los operadores de los sistemas de navegación perdieron comunicación con la nave, y cuando consiguieron retomar las maniobras, la batería llegó a estar en el nivel más bajo y los problemas en el sistema de propulsión sigue sin soluciones.

Por esto, se ha consumido tanto combustible que no se podrá realizar las maniobras de alunizaje suave como estaba previsto. Tampoco será capaz de mantenerse estable en el recorrido por falta de propulsión. Los encargados de la misión aseguraron que, pasado el día de hoy, miércoles 10, es difícil saber qué va a ocurrir con el módulo espacial. Así que están aprovechando para realizar la mayor cantidad de experimentos dentro de la nave y recoger datos mientras aun tengan contacto con el Peregrin.